La era de los Xperia Z ya son cosa del pasado, ahora es el turno en Sony para la generación X, el Xperia X es un dispositivo de gama media alta, que suma toda la inteligencia de su generación antecesora y puedo decir con certeza, que puede competir de igual a igual con los mejores smartphones del mercado.
Las principales razones para alabar a este dispositivo, se debe a que realmente su batería me facilitó la vida, fue una verdadera maratón de hasta dos días de energía en cada carga, incluso con visualización moderada de videos, y esto debido a dos modos de ahorro que posee el móvil, llamados ‘stamina’ y ‘ultra stamina’, que permiten tener muchas horas de teléfono seguro, tanto así, que se puede pasar la barrera de los dos días si es que se hace un ahorro generalizado.
A todo esto le debemos sumar el innovador sistema de carga Qnovo Adaptive Charging que promete aumentar la vida útil de la batería mientras ésta se carga.
En cuanto al audio -como toda la familia Xperia- mantiene el buen nivel por la salida de auriculares, que en mi apreciación personal debo decir que es lejos la de mejor calidad que he probado, incluso hasta sin auriculares, lo que se explica por la optimización de los marcos alrededor de la pantalla, en donde se incluyeron dos altavoces estéreo que suenan por encima de la media en su gama, en resumen este Smartphone tiene un extra: Sonido de alta resolución (LPCM, FLAC, ALAC, DSD) y además posee soporte para audio HD en diferentes formatos.
En el ítem pantalla del Sony Xperia X, se compone de un panel IPS LCD de 5 pulgadas que ofrece una resolución Full HD (1.920 x 1080 píxeles) que nos ofrece una densidad de 441 ppp, pero sin duda lo mejor de la pantalla del Xperia X no está en esa densidad, sino en el buen panel IPS que ha conseguido integrar Sony apoyado en tecnologías propias como X-Reality y Triluminos. Esto se traduce en una muy buena calidad en la reproducción del color, el cual se puede apreciar muy intenso y llamativo, teniendo la opción de regularlo en tres modos con un brillo bastante alto (más de 550 cd/m2).
Lo mejor: el contraste, con lo que puedo afirmar que en modo de vídeo y fotografía es fabuloso.
En cuanto a la visibilidad en exteriores, el panel IPS es mejorable, pero en todo caso la pantalla del Xperia X es perfectamente visible con luz directa, el brillo mínimo es realmente bueno y eficiente. Por ejemplo, facilita la visualización a oscuras sin ser molesto ni desagradable a la vista.
Un extra de su pantalla, es la opción de configurarla para que se active con un doble toque, opción que funciona bastante bien.
En cuanto al diseño me resultó bastante cómodo al tacto. Al tenerlo en las manos no genera mayor molestia por peso debido a que su grosor y peso están en un perfecto punto de equilibrio, además sus formas redondeadas lo hacen muy agradables al tacto. En relación a la presencia visual del diseño me pareció elegante y clásico. Pero los principales cambios en lo que es diseño no se pueden apreciar a simple vista ni al tacto. El reemplazo del uso del cristal por un aluminio muy cuidado en su parte trasera, es prácticamente imperceptible y ese el cambio que le otorga una elegancia sobria y limpia.
La bandeja no necesita de herramientas para extraerla y también es más segura que los sistemas que Sony integraba anteriormente. Ahí encontramos lugar para la tarjeta nanoSIM y la microSD opción que permite ampliar la memoria interna. Como puerto de carga se ha optado por microUSB.
Se mantuvo el botón para disparo de fotos, siendo esto un ítem bastante interesante, ya que pude comprobar que la cámara de 23 MP del Xperia X con un ISO de 12.800 para fotografía y 3.200 para video, le da una perfecta capacidad para capturas perfectas en espacios oscuros y cerrados. Es también verdaderamente más inteligente al predecir el movimiento, dando por resultado imágenes más nítidas. A esto fue que Sony le llamó el enfoque automático híbrido predictivo que realiza la captura en menos de 0.6 segundos. Esto funciona al momento de elegir una persona u objeto y la cámara lo rastrea automáticamente, incluso en movimiento, el objetivo elegido permanece enfocado. Es realmente buenísimo.
Otro punto más para la cámara es la increíble calidad de las selfies. Con 13 megapixeles más los sensores para poca luz tecnología TRILUMINOS que posee Sony, la cámara delantera ofrece nitidez en todo momento, incluso con muy baja luz. También entrega la opción de personalizar las selfies con los Efectos AR que posee el Sony Xperia X.
En el modo de grabación de vídeo, comprobé que el contraste es buenísimo, a pesar de que este Sony Xperia X no se lanzó con el vídeo 4K, algo totalmente realizable para Sony ya que dispone en su catálogo de dispositivos UHD, como por ejemplo sus televisores, por lo que habría sido perfectamente viable y provechoso generar esa resolución y tan sólo se quedó en 1080p.